Deja una fortuna de 10 millones de euros a un pequeño pueblo francés

Un hombre deja una fortuna de 10 millones de euros a un pequeño pueblo francés que nunca visitó. La cantidad equivale a cinco veces el presupuesto anual de la ciudad.

Desde Francia nos llega una historia de filantropía. Un parisino adinerado dejó su fortuna de 10 millones de euros a un pequeño pueblo de Normandía que nunca había visitado. Heredero de la fortuna que sus padres consiguieron en el negocio de la vinificación, Roger Thiberville, un meteorólogo, tenía una sola cosa en común con la ciudad de 1.800 habitantes: su nombre.

Deja su fortuna a un pueblo

Roger Thiberville, un meteorólogo que vivía en París, murió a los 91 años sin dejar descendencia. En su testamento, dejó su fortuna en herencia a la ciudad normanda de Thiberville (con la que compartía su apellido) y a sus 1.800 habitantes.

Con esta herencia, se financiarán proyectos que van desde un jardín público hasta una cancha de bolos.

Thiberville es una ciudad normanda típica que incluye un castillo del siglo XIX, pero poco más que lo que aparecería en los titulares o en las rutas turísticas.

El alcalde local, que describió la dotación como “inimaginable”, dijo que el dinero ayudaría a saldar una deuda de 400.000 euros del balance municipal, antes de financiar una variedad de proyectos, entre ellos una cancha de bolos y una cancha de fútbol sintética.

“Es una suma de dinero excepcional”, dijo Guy Paris, alcalde desde hace 28 años. “Obviamente, la cantidad supera la imaginación. Todavía no sabemos qué haremos con ella».

«No lo gastaremos todo. Vamos a gestionar esta dote como siempre lo hemos hecho con nuestro presupuesto municipal: con prudencia y responsabilidad”, dijo a la emisora ​​de radio France Bleu.

Un hombre deja una fortuna de 10 millones de euros a un pequeño pueblo francés

También te interesará leer:

Un especialista en clima de Pasadena de 24 años salva cientos de vidas de un incendio

Thiberville

Thiberville, el hombre, nació en Mantes-la-Jolie, ubicada en una región vitivinícola a 50 kilómetros al oeste de París. La herencia de sus padres estaba destinada originalmente a su hermana, quien murió sin dejar herederos, por lo que pasó a él.

Él también murió sin herederos y solo pidió que sus cenizas y una placa con su nombre se instalaran en el cementerio de la ciudad.

Otros proyectos en mente para el dinero incluyen un parque sombreado con paneles solares fotovoltaicos y áreas de recre0 adicionales en la escuela primaria local.

Fuente | Euronews