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El concurso de este año también reconoció a otros jóvenes con proyectos revolucionarios. Minula Weerasekera, de Oregon, ganó el segundo lugar con una solución para almacenar energía mediante compuestos orgánicos y azufre.
William Tan, de Nueva York, obtuvo el tercer lugar con un proyecto de arrecifes artificiales inteligentes impulsados por inteligencia artificial para apoyar el crecimiento de corales y otras especies marinas.
Estos jóvenes científicos han demostrado que, con creatividad y esfuerzo, es posible abordar algunos de los problemas más urgentes de nuestra época. Los finalistas de este concurso no solo reciben premios en efectivo, sino también mentorías y apoyo para continuar sus proyectos, abriendo un futuro lleno de oportunidades.
Sirish Subash y sus compañeros finalistas son ejemplos del potencial de la próxima generación para transformar el mundo a través de la ciencia y la tecnología. Al recibir el premio, Subash compartió un mensaje de aliento para otros jóvenes interesados en la ciencia: “Encuentra algo que realmente te apasione, porque cuando te importa lo que haces, puedes lograr grandes cosas y te motivas a esforzarte”.